Lista para disfrutar los lunes a las 21 hs en el Teatro Regina en avenida Santa Fe 1235. Por Nito Marsiglio.
Existen laberintos diversos. Algunos son enroscados y turbulentos que nos arrastran por caminos increíbles de pasiones encontradas. Uno de ellos es el laberinto del amor y desamor.
El desamor, ese monstruo de mil cabezas, acecha en las sombras. Los celos, la distancia y el tiempo desgarran los corazones, pero aún en la distancia, aún en el olvido, el amor persiste como una llama en el viento. La necesidad humana de estar juntos se impone a cualquier adversidad.
Así es el eterno laberinto del amor, un sendero enredado de encuentros y desencuentros, de pasiones y desilusiones, pero siempre impulsado por la imperiosa necesidad humana de estar juntos con alguien.
El amor trasciende lo cotidiano, lo lógico y lo imaginable, y se convierte en una fuerza que nos une en el tejido mágico de la vida.
Siempre está vigente la tentación de escapar.
De realizar un viaje, vaya a saber donde, pero que se pueda escapar. Sin embargo tarde o temprano, en el caso de los más afortunados, se termina uno dando cuenta que es imposible escapar de uno mismo.
Violeta Cárcova teje una comedia musical con toda esta temática
tan maravillosa como la obra de Violeta misma.
En esta comedia, Amalia (Tiki Lovera), una extravagante clienta que hace cerrar el restaurante para ella sola, se conoce allí con la mesera Julieta (Daniela Rubiatti) y le termina enseñando que el viaje que desea hacer los debe hacer dentro de ella misma.
Con mucho humor, bellas canciones, una muy buena puesta en escena, interpretación de los personajes y musicalización hacen que esta comedia musical deje al espectador muy gratificado.
Por esto, La Tentación del Viaje al que debe uno caer, es a la de ir el lunes al Regina.
