Protagonizado por Ailín Salas y Juan Luppi, con la participación especial de Dady Brieva y el elenco se completa con María Ucedo y con el trabajo de actores y actrices de Mendoza. Por Nito Marsiglio.
La dinámica entre padres e hijos es una interacción compleja que a menudo se ve afectada por diferencias generacionales. Uno de los escenarios más comunes y significativos es el choque entre un padre y su hijo mayor.
Esta fricción puede surgir debido a una serie de razones que van desde las diferencias culturales hasta los cambios en las percepciones sociales y los valores.
Diferencias en la crianza y el entorno pueden llevar a una discrepancia en los valores y las expectativas. Esto puede generar conflictos cuando los padres intentan imponer sus valores en sus hijos, que pueden tener una perspectiva diferente sobre la vida y sus elecciones.
Matias Rojo comienza el film con un Alberto (Dady Brieva) que no posee una relación muy armoniosa con su hijo mayor Leandro (Juan Luppi).
Ese es el día del cumpleaños de su hermano menor Juani (Francisco Tonidandel), y la idea de Alberto es que fueran los tres a cazar un jabalí, cosa que a Leandro no le resultaba muy simpática.
Eugenia (Ailín Salas), la pareja de Leandro, está embarazada con fecha de parto muy cercana.
Luego de la cena familiar la relación se vuelve algo tensa y la pareja decide al otro día regresar para su ciudad argumentando cuestiones laborales.
Y es aquí donde comienza un periplo que va aumentando en tensión de este muy logrado thriller.
Es de destacar la notable caracterización de los personajes principales de Brieva, Luppi y Salas. La muy cuidada fotografía y el manejo del suspenso con que se va desarrollando la obra.
Paisaje de Matías Rojo es un thriller con todas la de la ley que vale la pena disfrutar.
